Juegos que crean atracción 2 (Serie)

JUEGOS Y RUTINAS PARA A2

Una vez has ejecutado un buen abridor y logras hacerte parte del grupo, tu objetivo es generar atracción en tu objetivo a través de demostraciones de alto valor. En la segunda fase del juego de la atracción (A2) emplearás herramientas tales como las frases de valor, negaciones, decalificaciones, falsas descalificaciones, historias y otras rutinas.

Frases de valor

Las frases de valor son rutinas muy breves que amenizan la interacción, funcionan perfecto para ejecutarlos en medio de rutinas más grandes y mostrar una actitud divertida y juguetona.

A pesar de su brevedad estas frases te permiten mostrar alto valor. Algunas de ellas son negaciones, por lo que debes ejecutarlas de la misma forma en que ejecutas una negación, es decir, soltarla y continuando tu conversación con el set, sin esperar una respuesta de tu objetivo. Otras más funcionan como abridores directos:

• Se mira pero no se toca.

• ¡Eh, las manos fuera! La mercancía no es gratis, tú sabes.

• Lo siento, estoy comprometido.

• Bueno, en realidad estoy libre; pero no sabía cómo quitárteme de encima.

• Tu necesidad de atención y aprobación es casi tan lamentable como tu apariencia física.

• ¿Sabes? Puede que resulte un poco cruel decirlo, pero una de cada tres personas es fea. Mira a tu derecha, mira a tu izquierda, si no son ellos...

• Las chicas que no saben bailar no son buenas en la cama...

• No me gustan las virgencitas.

• ¡Oh, eres una bebé!

• Hemos roto, te dejo quedarte con el perro.

• Tú y yo nunca podríamos estar juntos. Somos demasiado parecidos, nos pelearíamos todo el tiempo... y yo ganaría siempre.

• Bonitos zapatos, ¿vienen con ese chile pegado en la zuela?

• ¡Qué padre vestido! Están de moda, ¿verdad?, porque acabo de ver a otra chica con un vestido exactamente igual.

• Te sienta increíble el color negro, te hace lucir más delgada de lo que eres en realidad.

• Me encanta tu cabello, me recuerda al nido de un pajarito.

• Me encanta tu cabello, aunque luciría mucho mejor si estuviese lavado. 

• ¿Conoces la diferencia entre un bistec y un pene? ¿No? Vente a cenar a mi casa.

• ¿Te gustaría saborear una cosita que ha hecho mi mamá? Yo.

• Bonitas piernas... ¿a qué hora abren?

• ¿Sabes lo que dice una chica después de su tercer orgasmo? ¿No? Pues yo sí.

• ¿Sabes que estoy dado de alta como donador de órganos? Pues aprovéchate, que aún estoy vivo.

• ¿Sabes porqué el 90% de las mujeres están insatisfechas sexualmente? ¿No? Es obvio, porque no puedo estar en todas partes a la vez.

• Perdona, es que perdí mi osito de peluche, ¿te vienes a dormir conmigo? 

• ¡Me lleva! Mi preservativo caduca mañana, sería una pena desperdiciarlo, ¿no crees?

• Mojas el dedo en la humedad de un vaso y lo secas en su blusa: “Será mejor quitarnos esta ropa mojada antes de que nos resfriemos”. 

• ¿Trabajas para DHL? ¿No? Es que como me parecía que mirabas el paquete.

• Mirando sus pechos: “¿Son de verdad?”

• Estoy luchando contra la necesidad de hacerte la mujer más feliz del mundo esta noche.

• Puede que no sea el hombre más guapo en este lugar, pero sí soy el único que está hablando contigo.

• Mi nombre es A-R-T-H-U-R. Recuérdalo, porque lo estarás gritando dentro de un rato.

• Por una sonrisa tuya recorrería un kilómetro, pero iría todavía mucho más lejos por eso que haces con la lengua.

• ¿Qué tal si tenemos una noche de pizza y sexo?, ¿qué pasa? ¿acaso no te gusta la pizza?

• Si nos ponemos de acuerdo para desayunar mañana, ¿cómo te despierto?, ¿por teléfono o con el codo?

• Tú, yo, esposas, nata líquida, ¿alguna pregunta?

• ¡Uff, qué calor! ¿No te apetece lamer un delicioso cono de helado?

Rutinas de alto valor

Las rutinas de alto valor son juegos más complejos dirigidos a demostrar alto valor y demanda social a través del grupo, estos juegos son perfectos para la segunda fase de la etapa de atracción A2. Mientras tu objetivo está siendo negado, e incluso ignorado tú mantienes a sus amigas muy entretenidas.

Sonrisa en forma de... C o U

“Tienes una estupenda sonrisa en forma de (C o U)”

Cuando ella te pregunte a qué te refieres podrás decirle lo que tu amiga Marieta te contó sobre las sonrisas en forma de C o en forma de U:

Las sonrisas con forma de U son las de las bocas cuyos incisivos son mucho más frontales al espectador que los otros, que se meten hacia dentro. Si mordiesen un cartón, dejarían una marca en forma de U.

Las sonrisas en forma de C, son aquellas de dentaduras más redondeadas. Los incisivos son frontales, pero los otros también lo son bastante. La forma en que los dientes se meten hasta el fondo de la boca de forma mucho más progresiva. 

Si mordiesen un cartón, dejarían una marca en forma de C.

Los dientes de Cristina Aguilera tienen forma de U, y los de Britney Spears tienen forma de C. Según mi amiga Marieta, a las chicas con sonrisa en forma de U se les cuelga la etiqueta de chicas malas y perversas, por muy poco que hagan.

En cambio, aquellas con sonrisa en forma de C no importa cuánto mientan o con cuántos chicos salgan, porque siempre tenderá a vérselas como chicas buenas. 

Esa es la razón de que el público le perdone todo a Britney Spears y de que, haga lo que haga, siempre se le considere una chica buena.

La memoria fotográfica

Este juego consiste en demostrar que posees una memoria fotográfica, pidiendo a alguna de las chicas que te diga diez palabras, con práctica pueden ser hasta veinte o más, y después tú repetirás las palabras que ella te dijo en el mismo orden que te las dijo. Después de haber ejecutado la rutina les enseñarás cómo hacerlo, con lo que demostrarás que no estás buscando lucirte, de lo contrario no estarías dispuesto a compartir tus secretos.

Este juego se basa en técnicas de nemotécnia, para lo cual es necesario primero memorizar diez palabras que rimen con el nombre del número de orden asignado a cada palabra que las chicas te proporcionarán, por ejemplo:

Un: Cancún

Dos: Tos

Tres: Estrés

Cuatro: Teatro

Cinco: Brinco

Seis: Sed

Siete: Machete

Ocho: Mocho

Nueve: Nieve

Diez: Pez

Todas las palabras riman con el número correspondiente, excepto el seis, ya que no se me ocurrió un sustantivo que rimara con dicho número. Desde luego que tú puedes crear tu propia lista de palabras, lo importante es memorizarla completamente en el orden correcto.

Ya en el campo sólo toma papel y lápiz y di al grupo “Chicas, necesito que pongan a trabajar su cerebro por dos segundos, necesito una lista de diez palabras, estas no tienen que ser difíciles pero sí tienen que ser diferentes”, las chicas toman el papel y el lápiz, escriben una palabra y se lo pasan a la siguiente, así hasta completar las diez palabras. Tomas entonces la hoja, hechas un vistazo a las diez palabras y dices entonces “Bien, ahora voy a demostrarles que tengo una memoria fotográfica”, y enseguida repites las palabras que ellas escribieron en orden descendente y después en orden ascendente, después si ellas te dicen un número tú de inmediato dirás la palabras que ellas escribieron en dicho número.

El secreto para ello es sencillo, tú ya tienes memorizada la lista de palabras previas, así que imaginemos que ellas escribieron las siguientes palabras:

1. Perro

2. Casa

3. Computadora

4. Comida

5. Ratón

6. Carta

7. Escuela

8. Automóvil

9. Disco

10.Catarro

Todo lo que necesitas es crear una asociación entre la palabra que las chicas te proporcionaron y la que tú inicialmente memorizaste bajo el mismo número de orden, y guardar la imagen en tu mente, por ejemplo:

En el número uno la palabra que has memorizado es Cancún y la que te proporcionaron es perro, entonces guarda en tu mente la imagen de un perro asoleándose en Cancún, con sus bermudas y gafas oscuras. 

En el número dos la palabra que has memorizado es tos y la que te proporcionaron es casa, guarda en tu mente la imagen de alguien tociendo mientras entra a su casa.

En el número tres la palabra memorizada es estrés y la que se te proporcionó es computadora, imagina entonces a un hombre sentado frente a la computadora jalándose los cabellos y hecho un manojo de nervios debido al estrés.

Y así con todos los demás números.

Con esas imágenes en tu cabeza te será muy fácil recordar la palabra asociada, incluso separada del resto de las palabras, si alguien te pide que digas la palabra que escribió en el número dos, tú sabrás que la palabra asociada a ese número es tos, y como en tu mente aún está viva la imagen del hombre tociendo mientras entra a su casa sabrás que la palabra es casa. Muy sencillo.

Incluso puedes impresionar más diciendo “Hagámoslo más difícil, que sean veinte palabras”, ellas entonces escribirán diez palabras más, que puedes asociar con las imagenes previas, por ejemplo, si la palabra número once es tequila, imagina al perro asoleándose en Cancún bebiendo una botella de tequila. Todo es nemotecnia.

Las mujeres son predadoras sexuales

“Las mujeres son auténticos predadores sexuales. En serio. Por ejemplo, son el único sexo que dispone de una parte del cuerpo diseñada únicamente para proporcionar placer erótico. Y hay diez veces más terminaciones nerviosas en esa parte del cuerpo que en cualquier otra cosa de las que existen en un hombre. 

Así que, ¿cómo puedes nunca estar tranquilo con una mujer?

Esa es la razón además de que ellas hagan “¡AAAAAAAHHHHHH! ¡AAAAAAAAAAAAHHHHH! ¡MMMMMMMHHHHHHAAAAAA!”

En caso de que no puedas o te de pena imitar esos gemidos, entonces di: “que ellas se desgañiten como posesas, mientras que los hombres hacen “grrrr”.

Además, nunca he encontrado una mujer que no empiece a toquetearme a los pocos minutos de estar con ella. Lo cierto es que hay momentos en que lo hacen sentir a uno como una salchicha con patas. Así que, “¿cómo puedo confiar en ustedes?”

Las chicas superpoderosas

“Por cierto, ustedes me recuerdan a las Chicas Superpoderosas...”. Después de esto le pones apodo a cada una de ellas y comenzar a burlarte. Ideal para un grupo de tres chicas.

Otro test de las mejores amigas

“¿Y cuánto hace que ustedes se conocen? Les voy a hacer un test que a mis amigos y a mí nos gusta llevar a cabo. Se trata del test de las mejores amigas.

¿Listas? Ok, haré una sencilla pregunta. ¿Las dos usan el mismo champú? ¿Si o no?”

Antes de contestar, suelen mirarse la una a la otra y suelen confirmarse en silencio y casi telepáticamente. Si esto ocurre, les puedes decir: “Mira, ya sé que son tan buenas amigas, la respuesta no importa. Lo sé porque han hecho lo que suelen hacer las mejores amigas, que es mirarse la una a la otra y usar “telepatía de amigas”.

Si no existe entre ellas demasiada conexión mantendrán el contacto visual contigo, si la tienen se mirarán antes de responder y normalmente lo harán después. Si ese es el caso di “¡Oh, no! Lo están haciendo otra vez”, lo que las hará reír más.

Este test es muy bueno para usarlo con grupos de dos personas, te permite calibrar y descubrir cuál es la más dominante. Si se miran las dos al mismo tiempo existe equilibrio, pero si una mira a la otra primero esta es la más pasiva porque busca la aprobación de su amiga.

El tres

“Préstame atención y concéntrate, ¿de acuerdo?”, dile mientras la miras a los ojos fijamente. “Quiero que me digas un número del uno al cuatro, ¿Ok? ¡Ya!” Cuando dices “uno”, señalas con el índice de tu mano derecha el principio de una línea imaginaria. Cuando dices “dos”, señalas con el índice de tu mano izquierda el final de dicha línea a la izquierda. Y, al decir “ya”, llevas de nuevo el índice de la mano derecha al lugar de la línea imaginaria donde se encontraría el número tres si esta estuviera dividida en cuatro puntos. Y, antes de que ella te pueda responder, le dices: “¡el tres!”

El siete

“Préstame atención nuevamente y concéntrate todavía más...”

A continuación haces lo mismo que con el tres, pero esta vez pídele un número del uno al diez y adivina el siete.

Chiste del presidente

“El presidente de los Estados Unidos había ido con su señora a visitar la granja de pollos más modernizada del país. Como el Sr. Presidente recibió una

importante llamada de teléfono, la visita la hicieron por partes. Primero la llevó a cabo la mujer del Presidente, y luego el Presidente.

Al visitar la sala de fecundación, a la Sra. Del Presidente le llamó la atención el hecho de que hubiese un solo gallo, rodeado de cientos de gallinas.

—Y dígame —le preguntó al guía—. ¿Con que frecuencia mantiene este gallo actividad sexual con las gallinas?

—Este gallo es muy activo, señora —respondió el guía—. Lo menos, veinte veces por día.

—Mmmhh…. Interesante. Haga el favor de informar de este hecho al Sr. Presidente.

Cuando le tocó el turno al Presidente, el guía lo llevó a la sala de fecundación, y le dijo:

—Sr. Presidente, me ha pedido su señora que le informe del hecho de que este gallo mantiene actividad sexual con las gallinas al menos veinte veces al día. 

—Vaya —contestó el Presidente—. Y dígame: ¿lo hace siempre con la misma gallina o con gallinas diferentes?

—¡Ah, noooo! —exclamó el guía—. Lo hace cada vez con una gallina diferente. 

—Bien —respondió el Presidente—. Haga el favor de informar de este hecho a mi señora.”

Chiste del reloj

Un muchacho pueblerino le dijo a su papá :

-Padre, por favor cómpreme un reloj.

El papá sorprendido le respondió:

-¿Y para qué quieres un reloj? Si aquí en el campo nos guiamos por el canto de los gallos y la luz del sol. Tú no necesitas un reloj, ¿Para qué lo quieres?

-Pues verá padre- respondió el muchacho -lo que pasa es que ya tengo novia, es muy bonita, nos vamos atrás de los maizales, nos besamos, nos tocamos, de pronto ella comienza a estremecerse y a respirar muy rápido, y me dice “José, dámela ahora; dámela ahora”. Y yo no puedo darle la hora porque no tengo reloj”.

Miedo a las Iguanas

No sé quién me dijo que Internet está lleno de pervertidos, pero debía haberlo escuchado.

Hace poco, por ejemplo, mi amigo Julián me metió en uno de esos portales donde salen montones de tipas haciendo poses lascivas y diciendo cosas como: “Hola, soy alegre y amiga de mis amigos. Me gusta mucho sonreír, pasarlo bien y salir con mis amigos.”

¿Amiga de mis amigos? ¿Sonreír? Yo ya sabía que había algo claramente perverso en todo aquello, pero como soy un aventurero decidí seguir adelante con la historia de todos modos. Eso sí, dejé bien claro que era un cerdo, egoísta, histérico y dramático. Un mensaje que, por lo visto, todos las pervertidas y pervertidos del mundo captaron de inmediato.

A partir de entonces, a cada rato tenía a alguien abriéndome un privado. Casi siempre alguien con foto de rubia despampanante, entre otras cosas porque si alguien no tenía foto de rubia despampanante en el perfil pasaba olímpicamente de ella y no la dejaba agregarme. Lo siento, no voy a disculparme por ello.

El caso es que las conversaciones siempre se reducían a lo mismo. Venían a ser algo así:

Ella: Zumbido.

Yo: Me hago el sueco.

Ella: Zumbido.

Yo: Qué gran estupidez eso de los zumbidos (esto lo pensaba, no lo decía; simplemente no contestaba).

Ella: Algún muñequito haciendo gestos ridículos en la pantalla.

Yo: Qué pasa, cómo va eso (ya veis que en el fondo soy un blandengue, los muñequitos dando saltitos siempre me han llegado al corazón).

Ella: Invitación para ENVIAR imágenes con la web cam.

Yo: Gracias, pero estoy un poco cansado para el cibersexo.

Ella: Nueva Invitación para enviar (no recibir) imágenes por la web cam.

Yo: De verdad, es que me gusta oler a la gente con la que hago guarradas y esas cosas.

Ella:- - - No vuelvo a saber de ella.

Pues bien, esta secuencia se repitió tanto que, cuando por fin di con una chica simpática y capaz de mantener una conversación normal… Chicos, me enamoré. 

De hecho, llevaba ya casi media hora chateando con ella y me encontraba ya tan entusiasmado con la chica que estaba por pedirle el teléfono. Cinco minutos antes me había estado hablando de su colección de animalitos y a mí la verdad es que los bichos me chiflan. Entonces, justo mientras le estaba escribiendo que me diese su teléfono para seguir hablando, me pregunta si quiero ver su Iguana.

¡Guuaaauuu…! ¡Una Iguana…! ¿Será esto el amor ese predestinado del que hablaban las películas

que me llevaba a ver mi ex? Aun no me he recuperado de la emoción cuando me envía una invitación para recibir imágenes de su web cam. Sin dar crédito a la excitación que me invadía, clico “aceptar”, espero impaciente unos segundos y…

Ahí estaba.

Un enorme gordo barbudo con los pantalones bajados y meneando violentamente su… “iguana” con la derecha.

Chiste de los naúfragos

Un barco naufragó y sus tripulantes se ahogaron en alta mar, excepto tres de ellos: María, Juan y Raúl, ellos nadaron hasta alcanzar una isla desierta. Juan era el esposo de María y Raúl su amante.

Pasaron varios meses y tanto María como Raúl morían por un rato de sexo, pero la presencia de Juan se los impedía; él no se separaba de su esposa ni un sólo instante. Desesperado Raúl subió a una palmera y desde ahí les gritó:

-¡Hey, ustedes dos! Dejen de hacer el amor.

-¿Estás loco?- respondió Juan -No estamos haciendo el amor.

-Pues desde aquí se ve cómo si estuvieran haciendo el amor- insistió Raúl.

-No, de verdad. No estamos haciendo el amor.

-Pues desde aquí parece que sí- si no me crees súbete para que lo compruebes. 

Raúl bajó entonces de la palmera y enseguida subió Juan. Cuando llegó a la parte más alta quedó más que convencido:

-¡Vaya, sí que es verdad! Realmente se ve cómo si estuvieran haciendo el amor.

Pánico en los mingitorios (urinarios)

No sé cómo le hacen ustedes para satisfacer sus necesidades en lugares públicos, pero yo últimamente tengo mis reservas al respecto.

Por ejemplo, hace como un mes Susana me pidió que fuera a comprar suchi en un restaurante japonés cerca de su casa. Como salí con mucha prisa ya en el camino me dieron ganas de orinar. Fui al sanitario, me acerco al mingitorio, me la saco tan tranquilo y procedo.

Pues bien, justo al terminar me doy cuenta de que el tipo de mi izquierda está como vibrando. Lo examino con un poquito más de atención y… Adivinen. 

En efecto, se estaba haciendo una a mi salud. ¡Imáginense cómo me sentí! El caso es que puse una cara de ninja asesino, pero él ni se inmutó. 

Tratando de olvidar el incidente pero aún sin creer lo que estaba ocurriendo, voy a lavarme las manos. Entonces lo veo reflejado en el espejo, deleitándose mirándome el culo. “Esta vez”, me dije, “sí que no”… Hinché las venas del cuello, me puse rojo y puse cara de psicópata homicida. No sabía lo que estaba a punto de ocurrir, pero supuse que nada bueno si no dejaba de mirarme. Por eso, lo miré fijamente para ver si se avergonzaba y salía por piernas. Y… adivinen.

Muuuuy lentamente, sin apartar sus ojos de los míos ni un momento, el tipo dibuja una media sonrisa, se muerde los labios y se pasa la lengua por estos con lascivia. Me pregunté qué habría hecho Susana en mi lugar. La inspiración no tardó en llegar, pues en ese momento comprendí que matarlo lo habría puesto más cachondo todavía. Así que ya os podéis imaginar lo que hice.

Salí por la puerta. Y, a los dos segundos, regresé como si algo me obligase a hacerlo. Lo miré suspirando, como transportado, puse las dos manos sobre mi corazón y empecé a imitar con ellas el bombeo del mismo. Después me llevé la palma de la mano a los labios y le envié un beso volador. Todo sin dejar de suspirar. Me despedí con la mano como lo hacían las protagonistas de las películas mudas, y me fui con la satisfacción de haber llevado a cabo una buena obra.

Personalmente, creo que aquello debió bastar para que se corriera.

Carrera de ratones

“Si quieres profundizar en tu propia persona, puedo hacerte un test de personalidad realmente poderoso.

Yo no lo hago casi nunca, pues a veces me permite averiguar más cosas sobre la persona de las que quiero saber. ¿Estás segura de que quieres hacerlo? 

Pues ten bien presente lo que te voy a decir. 

Hay una historia superficial, pero no debes prestar atención a la historia, sino concentrarte en tus sentimientos, o de otra forma no funcionará.” 

“La historia que te voy a contar es sobre una carrera de ratones. Hay un ratón ciego, un ratón cojo y un ratón sordo. En realidad no son ratones, sino símbolos de tu yo interno.”

Tomas un bolígrafo y lo sitúas en posición para escribir sobre su brazo.

“Ahora préstame atención”, le dices, y distraes su atención de nuevo: 

“Como te he dicho, es muy importante que te olvides de la historia, escuches solo a tu corazón y te concentres solo en las órdenes que debes dar para decidir quién gana o pierde la carrera. Recuerda que se trata solo de impulsos, no de racionalizaciones. Además, debes relajarte totalmente. Es crucial que la energía fluya libre de barreras entre tú y yo y que escuches esa voz mágica que te habla desde lo más profundo de tu ser.

Empezamos con el ratón ciego. Tú decides cuándo debe parar. Cuando creas que debe hacerlo, le dices para”

Dibuja una línea sobre su brazo hasta que ella diga “para”; lo mismo con el ratón cojo. Con el ratón sordo también harás lo mismo pero cuando ella te diga que pares no lo hagas. Ella insistirá en que pares hasta que se de cuenta de que el ratón es sordo y no puede escuchar la orden, para entonces ya tendrá muchos garabatos dibujados. Es un hecho que se acordará de ti.

El test de las frutas

“Imagina que estás en medio de la selva y encuentras una cabaña a la orilla de un río. Entras en la cabaña y ves a tu derecha 7 camas pequeñas y una pequeña mesa con 7 sillas a tu izquierda. Sobre la mesa hay un frutero que contiene 5 frutas que son:

Plátano

Piña

Pera

Durazno

Manzana

¿Qué fruta escogerías?

Tu selección revela mucho de ti.

RESULTADOS:

Plátano: Significa que eres de las personas a las que les gusta comer plátanos

Piña: Significa que eres de las personas a las que les gusta comer piñas

Pera: Significa que eres de las personas a las que les gusta comer peras

Durazno: Significa que eres de las personas a las que les gusta comer duraznos

Manzana: Significa que eres de las personas a las que les gusta comer manzanas

Ustedes son mi prueba social

“Estoy seguro que todas ustedes se sienten capaces de conquistar a cualquier hombre, pero no es así. Solo se pueden ligar a los pobres desesperados que se acercan a ustedes. Seguro que hay hombres con los que les gustaría hablar, pero ni siquiera se atreven a acercarse porque los ven rodeados de mujeres.

Del mismo modo, ¿Se dan cuenta de que muchas mujeres quieren venir a conquistarme, pero no se atreven porque me miran con ustedes?. Así que, chicas, espero que aprecien el tiempo que estoy dedicándoles”

No me gusta malgastar mi semen

“No me gusta malgastar mi semen, debo tener una buena razón para follarme a una chica. Eso no significa que desee tener una relación seria con ella, salgo de una relación un tanto especial y no estoy preparado en este momento para otra.

Por ello tengo amigas, sí, a las que mantengo contentas. ¿Qué gano malgastando mi semen con alguien que no merezca la pena? Es decir, no quiero relaciones, ¿me entiendes?, pero tampoco me voy a follar a alguien que no se lo haya ganado o no esté a la altura.

Y mi requerimiento no es necesariamente físico. Es claro que me tiene que gustar, pero la belleza es común…

Y piénsalo, ¿merece la pena el tiempo y la energía malgastadas en un mal polvo que no va a ninguna parte? ¿Merece la pena derramar mi semen por algo así?

¿Cómo puedo saber si ella sabrá excitarme? ¿Es alguien con quien desee conectar a un nivel más profundo? ¿Qué puedo admirar en ella? ¿Qué tiene ella que me resulte diferente y misterioso? ¿Vienen a mi mente imágenes de esa persona cuando estoy con ella? Si no lo hacen, no hay nada que hacer.”

Chiste del préstamo

Una pareja estaba pasando por una situación económica difícil, así que después de mucho pensarlo tomaron la decisión de que ella ayudará a la economía del hogar trabajando en el oficio más antiguo del mundo. Se paró en una esquina y el marido se escondió detrás de un poste para asesorarla.

No tardó en pasar el primer prospecto de cliente, detuvo su auto y la llamó:

-¿Cuánto?- preguntó el prospecto.

-Permítame- respondió la mujer, se dirigió a donde estaba su esposo y le preguntó -dice que cuánto.

-Dile que quinientos pesos- respondió el marido.

Ella volvió con el cliente y le informó la tarifa:

-Son quinientos pesos.

-Es muy caro- reclamó el prospecto -sólo traigo cien.

-Permítame- contestó la mujer, y volvió a donde su esposo:

-Cariño, dice que sólo trae cien pesos.

-Pues dile que por cien sólo puedes hacerle sexo oral.

Nuevamente le informó al prospecto lo que su esposo le había dicho:

-Por cien pesos sólo sexo oral.

-Muy bien, aquí están tus cien pesos- respondió el cliente, sacó un billete de su cartera y se lo entregó, enseguida dirigió su mano hacia la bragueta, se bajó el cierre, y sacó un instrumento completamente erecto cuyas medidas superaban los treinta centímetros. La mujer tragó en seco y abrió los ojos sorprendida. Fue corriendo a donde su marido y casi de rodillas le suplicó:

-Mi vida, por favor, préstale cuatrocientos pesos.

Rutinas con el celular

Para lucir como un hombre alfa necesitas proyectar una imagen de éxito en todos los aspectos, no sólo tu ropa debe ser elegante y tus zapatos estar siempre bien lustrados, otros accesorios te ayudarán a resaltar aún más tu vestimenta y estilo personal, por ejemplo un reloj fino, un buen par de gafas oscuras (para el día), una colonia cara y un celular.

Procura tener el mejor celular que puedas adquirir, existen buenas razones para ello, por ejemplo, te sirve perfecto para apartar a una chica y así facilitar el que te siga en el movimiento de A3 a C1. Además, un celular es divertido para ellas, les gusta estar hurgando en los juegos, las imágenes, los videoclips, y por lo general su curiosidad las hace atreverse a buscar en lo que es más privado como tu agenda y tus mensajes. Todo esto unido al hecho de la ostentosidad que proyectas.

Así por ejemplo, puedes instruir a tus amigos para que si les reciben una llamada perdida te llamen, al contestarles les dices algo como “¿Yolanda? ¡Hola chicuela! ¿Qué se te ofrece? ¡No me digas que llamas para invitarme a otra fiestecita como la del viernes pasado, porque si es así, olvídalo! Tu amiga y tú querían emborracharme con no sé qué intenciones pero seguro que nada buenas... ¿Tu amiga te pidió que me dijeras eso? ¡Olvídalo! No me interesa salir con ella, está loca y parece un pulpo tocándome por todos lados...”

Puedes simular una conversación y desplegar en ella cualquier demostración de alto valor que desees, en este caso estás demostrando preselección.

Otras recomendaciones:

• Si no tienes ningún amigo que esté disponible para llamarte o te da pena responder de esta forma compra un celular con despertador, estos celulares se programan para sonar a una determinada hora con el mismo timbre que tienes programado para las llamadas. Entonces, antes de acercarte al set programas tu celular para sonar, digamos, en cinco o diez minutos, cuando lo haga oprimes una tecla, supuestamente para descolgar pero en realidad para desactivar el despertador, e inicias el supuesto diálogo.

• En tu agenda, cambia los nombres de tus amigos por nombres de mujeres, por ejemplo cambia a Daniel por Daniela, Armando por Adriana, Mario por María. Así, si tu objetivo empieza a hurgar en tu agenda encontrará muchos nombres de mujeres y demostrarás preselección.

• Pídele prestado su teléfono a un amigos y mándate un mensaje de texto, algo como “Hola bebé, ayer quedé realmente impresionada contigo, necesito verte otra vez. Llámame”, otro como “Mañana Joana, Perla y yo iremos a jugar boliche; ¿quiéres venir con nosotras? Es que eres muy divertido”. Guarda esos mensajes en tu celular, como en la agenda tienes dados de alta a tus amigos con nombres femeninos parecerá que esos mensajes te los han enviado mujeres. Cuando tu objetivo hurgue entre tus mensajes los leerá, con lo cual nuevamente demostrarás preselección.

• Guarda imágenes y videos donde apareces conviviendo con mujeres, practicando deportes extremos, vistiendo como un modelo de revistas, o cualquier otra cosa que te haga reflejar alto valor. Si notas que ella está hurgando en tus fotos y videos aprovecha para ejecutar el juego de las fotografías, el cual con un celular funciona mucho mejor que con el tradicional sobre, porque no pensará que lo tenías preparado. 

• Si deseas disponer de más números supuestamente de chicas, y mandarte todos los mensajes de texto que desees compra algunos chips, así podrás manejar varios números desde el mismo teléfono; colocas un chip, te mandas el mensaje, colocas el otro y el mensaje que tú mismo te enviaste aparece como recibido de alguien más.

Preguntas triviales

En muchas ocasiones funciona bien introducir preguntas triviales dentro de la conversación, a pesar de triviales son interesantes y también funcionan como abridores indirectos. Es como si aplicaras una encuesta de opinión, ejemplos:

• ¿Perros o gatos?

• ¿Belleza o inteligencia?

• Hilo dental: ¿antes o después del cepillado?

• Sexo: ¿por amor o por diversión? 

Hechos

Hacer un breve comentario en torno a un hecho histórico o social, que sea divertido y curioso, te ayudará a anotarte puntos, siempre y cuando estimulen las emociones y sean realmente interesantes. Con ellos demostrarás que eres un hombre inteligente y culto, pero no abuses de este recurso o parecerá que estás tratando de impresionar. Ejemplos:

• “¿Sabías que la mujer promedio consume dos kilogramos de lápiz labial al año? Cuando digo “consume”, quiero decir que los traga, que los digiere realmente. Me pregunto cuántos kilos habrás ingerido tú a estas alturas. Y… ¿cuántos habré ingerido yo? Uuuups….”

• “¿Sabías que si permaneciéramos cabeza abajo indefinidamente solo veríamos las cosas del revés durante un cierto tiempo? Transcurrido este, dejaríamos de percibir las cosas del revés, y al caminar derecho de nuevo volveríamos a ver las cosas al revés hasta que nuestra visión se ajustase de nuevo. ¿Te imaginas ir por el mundo derecho y viéndolo todo del revés?” 

• “¿Sabías que una vez Charles Chaplin participó de incógnito en un concurso de imitadores de Charles Chaplin? Lo curioso es que, uno esperaría que ganara puesto que estaba imitándose a sí mismo, pero no fue así, quedó en tercer lugar. ¿Tú en que lugar crees que quedarías si tuvieras que imitarte a ti misma en un concurso?”

• “¿Sabías que Elvis Presley se pintaba el cabello de negro? Realmente era castaño claro. Lo supieron al desnudarlo para la autopsia.”

• “¿Sabías que a los lagartos les resulta más traumático que los muevan de un lado para otro que si les cortan un dedo? Por eso los científicos los marcan cortándoles dedos en lugar de con pintura, que supondría mayor trastorno psicológico para ellos”.

• “Mucha gente piensa que las cebras son como caballos blancos con rayas negras, pero ¿sabías que en realidad las cebras no son blancas con rayas negras, sino negras con rayas blancas?”

• “Hablando de visión, ¿sabías que hay un punto ciego en nuestro campo de visión? Para comprobarlo sólo necesitas realizar el sencillo experimento de coger una hoja en blanco, marcar una equis y luego marcar un punto a cinco centímetros a la derecha de ésta. Después cierras el ojo izquierdo, te concentras únicamente en la equis y mueves la hoja, acercándola y alejándola de tu cara en línea recta, sin desplazarla hacia los lados, verás que hay una distancia a la que el punto desaparece de tu radio de visión. 

Una vez detectada esa distancia, no importa durante cuánto tiempo mantengas el papel ante ti, porque el punto… ¡ya no estará allí! Pero si acercas o alejas el aspa en la que centras tu mirada el punto aparecerá de nuevo en tu visión periférica.”

Puedes encontrar muchos interesantes en libros, revistas, periódicos e Internet. 

Sólo procura que se trate de hechos curiosos e interesantes. Recuerda que lo que te interesa a ti no siempre será interés para los demás, por eso procura encontrar interés general en cada hecho que añades a tu repertorio.

Trucos de magia

Los trucos de magia son una forma muy divertida de demostrar alto valor, como abridores o rutinas son excelentes para ganar la atención y el respeto del grupo rápidamente y con elegancia.

La mayoría de estos trucos requieren práctica, pero el tiempo invertido en adquirirla te será muy bien recomendado. A continuación compartiré contigo dos sencillos trucos de magia, aunque desde luego tú puedes buscar muchos más:

El misterio de la servilleta

Al llevar a cabo este truco tomarás una servilleta de papel, la romperás en muchos pedacitos y pedirás a alguien del grupo que una todos los pedazos en una bola grande, sacas un pañuelo para envolverla, para darle un toque chusco justo en ese momento tu público descubre que hay otra servilleta que pensabas cambiar por la primera, no le das importancia, dices las palabras mágicas y pides a otra chica en el grupo que desenvuelva la servilleta rota. ¡Sorpresa!, la servilleta no está rota.

¿Cómo se hace?

Consigue tres servilletas iguales y haz bolita dos de ellas, la otra déjala entera.

Una de las bolitas colócala dentro de un pañuelo y ubícalo en tu bolsillo de tu camisa o de tu saco. La otra bolita átala con un hilo y un alfiler imperdible (seguro) al bolsillo.

La otra servilleta, la que no hiciste bola, preséntala al público tomándola con tus dedos en una esquina, y pártela en pedacitos.

Entrega los pedacitos a alguien de tu público y pídele que haga una bola con los pedacitos, después toma la bola y hazle saber al grupo que la envolverás en un pañuelo para restaurarla.

Toma el pañuelo de tu bolsillo y saca la bola oculta sin que se note demasiado. 

Saca también la bolita que está atada a tu bolsillo, para que el público piense que estás haciendo trampa y provoques su risa, al menos tiempo que centras la atención en ella.

Toma la bola rota de la mano del espectador e inmediatamente cambiála por la bola entera, guarda la bola rota en el bolsillo junto con la que se encuentra atada, y entrega el pañuelo con la bola completa al espectador.

Una vez hecho esto solo di las palabras mágicas, pide a tu público que las repita junto contigo, y eso es todo. Al abrir el pañuelo se encontrarán con la servilleta entera. Te aplaudirán y ovacionarán.

El cigarro

Este es un truco ideal para aplicarlo en grupos donde una o más de las chicas fuman. Dile que te proporcione un cigarro y lo volverás mágico, cuando te lo entregue lo ocultas de su vista mientras dices unas palabras mágicas y se lo regresas, pídele que lo encienda y lo fume completo sin tirar la ceniza en el cenicero. El cigarro se irá consumiendo pero las cenizas no caerán, aún cuando se consuma hasta la boquilla las cenizas seguirán en el cigarro.

¿Cómo se hace? Coloca una aguja o alfiler que atraviese todo el cigarro, pero sin que se vea. El alfiler sostendrá la ceniza y esta no se desprenderá.